Hay palabras en la vida que merecen ser dichas con el corazón. Y por
ser difícil la tarea, solo unos pocos son elegidos para hacerlo.
Hay voces que merecen ser escuchadas por toda la eternidad, por eso,
ésta vez, Dios ha señalado con su dedo al mejor de todos.
Porque quién sino Juan para estar en el cielo como presentador de
lujo de todos los músicos que se han ido últimamente y de aquellos
ídolos de siempre que lo esperan sobre algún escenario celestial?
Referente de locutores y periodístas, amigo de sus amigos, querido
por todos, el quinto beatle deja su colección de anécdotas en la
memoria de todos los que admiramos su paso por nuestra galaxia
durante 43 años de carrera. Toda una vida dedicada al "buen decir" y a
encontrar la más amable forma de contar.
Un orador como pocos.
Por algo Tata Dios no quiso que sufriera y dijo "hasta aquí llegas
Juan"; y allí, en el más amplio paraíso, ya anda entrevistando, y
contando; y charlando con John y George mientras Luis Alberto y
otros tantos le dan la bienvenida a la eternidad. Porque solo los
grandes como él, logran perdurar en el tiempo y se vuelven
inoxidables en nuestros recuerdos.
Estarás "allí, aquí y en todas partes" Juan, como en la canción.
Inmortal como Let it Be.