Quiero ser suave...

Vengo de pensar...

Fui y vine respondiendo a mis antojos,
hasta descubrir que no se quién soy.


Ayer las paredes que fueron incorruptibles hoy son cuarto oscuro de mis pensamientos.

No podría votar por mi.


Los renglones son confusos.

Mezclan sensaciones.

Son contradictorios con el sentir real.


Pero, ¿quién distingue entre lo efímero y lo cierto?

¿quién con la capacidad de discernir cuál es el sentimiento?


Amar...

¿con el cuerpo invitado haciendo acto de presencia,

ó en la utópia mental donde todo es perfecto y sin discordia?

Tener...

¿con los abrazos tangibles y los besos espontáneos,

ó disfrutando de aquellos que carecen de piel?

Soñar...

Sin preguntas. En la profundidad del campo de mis sueños,

todo vale pero a nada me atrevo..

El fantasma del fracaso se cubre de sábanas y sale con su capa a espantar.

Caben en una noche sola todas las fortunas que pueda imaginar para mi futuro en desobediencia con mis deseos.

La silla espera vacia..

Soy yo entre miles de personas llorando con la emocion a cuestas por la cancion que se mueve por el aire...

Solo yo y mis lagrimas entre las caras absortas porque hay alguien que vive para darle a su guitarra sentido...

El tiempo es arena en mis manos...Y a veces no puedo con la soledad...*

Por eso el lago se hace eterno...

y en su reflejo no me hallo...

solo las gotas que lo colman son parte de un todo que esta vez, otra vez, no soy yo.


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nota: *Lago en el cielo. Gustavo Cerati. Ahi Vamos.

Y cada vez que vuelvo...*

Caerá la tarde apresurada.

Sabe de mi peculiar deseo de paz.

Dormita entre nubes y reposa; aletarga su llegada.

Pero irremediablemente llegará para quedarse.

Y con la oscuridad del fin de la jornada,

y amparada por lo negro de los cielos,

dará mil vueltas hasta que decida entrar a mi guarida.

He de buscar el remanso que ofrece su poder.

Necesitan mis ánimos una canción de cuna.

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Nota: * fragmento de "Cae el Sol". Soda Stereo.

Este dia es algo de sal...*

Una vez más y como siempre desde que tengo memoria y sensibilidad epidérmica, la mañana se despierta temprano para que salga a acompañarla. Cronograma perfecto. Todo un ciclo diagramado; cada día pensado; sin instantes espontáneos; con poco espacio para improvisar.

La mañana irreverente abofetea mi rostro. Sacude con sus horas cualquier tiempo de espera.

Mis mañanas son siempre largas; desde que empiezan cuando aún es de noche hasta que culminan cuando el reloj da la orden.

Hoy es una mañana más; una del montón. Iniciando la semana, promediando febrero. Pero mis ganas de ésta jornada parecen apaciguadas; amenazadas por un próximo tirón de conciencia.; dispuesta a no salir de donde haya que hacerlo.

Sin argumentos.

Simplemente sucede.

Quien no merece la pena no merece llamarse humano.

Lo mismo que la felicidad desbordante, la sensación de vacuidad con posterior síntoma de luto en el alma, la tristeza mencionada, llega y se instala; no pregunta; arremete, pero con la frecuencia necesaria para ser una constante, contrariamente a la dicha que solo se limita a momentos y cuestiones que tendrán que ver con algo del día anterior...después se pasa...las sonrisas se apagan y queda la nada...

Esa nada, la mañana siguiente será sustento de una posterior continuidad de días malos, opacos, y con soberbias ganas de no querer soportar ningún exceso. Cualquier valor agregado será detonante para que un nuevo estallido se precipite sobre mis ánimos.

Humor a la intemperie.

A merced de la imprudencia climatológica de una Mar del Plata cada vez más silenciosa. Gris.

Pasará...y el fantasma no podrá dormir..**

Sin intención de esforzarme. Indignada con mi alrededor. Angustiada al ver que todo confluye en un mismo río. "Todo" es todo lo triste que me agobia; y el río tan solo un mar camuflado ó la antesala que lo precede porque éste, ya ha colmado sus aguas con llantos de textos de ayer..

Ninguna posión...cura sanadora...

Nota: * Luis Alberto Spinetta. Canción para todos los días de la vida.

**Gustavo Cerati. Fantasma.