Desde la Asociación del Fútbol Argentino, después de una reunión en la que al menos yo tenía puesta mi Fe para ver si aunque sea "un poquito", resucitaba éste fútbol nuestro, ó al menos parte de su espíritu, terminé de convencerme de que no solo el Fútbol Argentino está sucio: nuestra humanidad argenta también.
Han unificado las dos categorías más importantes: la primera división, y la B Nacional. "Justo" ahora que River perdió su condición de equipo de primera y que debería enfrentar un durísimo campeonato en la B contra equipos que hace años vienen peleando por un lugar allá arriba. Eso no será posible señores.
La AFA decidió que ambos torneos se unan para tener un solo gran torneo, único en el mundo con 40 equipos, donde la mística ya no existirá. Empezando por éste campeonato que viene, que será como los de siempre: unos jugando allá y otros jugando aca abajo, pero sin la necesidad de pelear por algo: bastará con no terminar más allá del puesto 17, pero solo porque eso significará ganar "menos dinero". Los equipos de la A no se rasgaran las vestiduras como antes para ver quien es el más grande de Argentina; los equipos de la B no se arrancaran los dientes ni romperán las piernas, ni transpiraran la camiseta para llegar a jugar con un grande por mérito propio. Los que descendieron por falta de buen juego o porque el rival de la B fue mejor, volverán a jugar con sus viejos amigos, sin sacarse el estígma de haber descendido, en el fervor popular, y habiendo sido "salvados" por la varita mágica. Billetera mata fútbol. River descendió por una serie de errores, al igual que Gimnasia y Huracán. Y Atlético Rafaela y Belgrano ascendieron en su ley poniendo huevo, garra, espíritu y corazón. Lo mismo que los tantísimos equipos que poblaron la primera como Olimpo, Tigre, All Boys, Godoy Cruz...
Lo curioso es que mientras se gestaba ésta locura, también se discutía, ó al menos eso nos dijeron, el futuro de la Selección Nacional, que hace 18 años viene de mal en peor. Que si Batista si, que si Batista no. Ahora hay que esperar para ver quien es el que agarra la papa caliente.
Que raro todo. Yo ante todo soy fanática del fútbol. Me gusta ver fútbol. Me genera adrenalina ver partidos aunque no juegue el Boca de mi alma. Sigo viendo a la Selección la dirija quien la dirija, juegue quien juegue. Ahora, me pregunto, cómo vamos a hacer para pedirle fervor, pasión, sangre, calor, a los jugadores de la albiceleste, si vamos a empezar a motivar a los jugadores con guita? Insultamos a los jugadores que vinieron del fútbol internacional por millonarios y pecho fríos, aunque talentosos; y resulta que la pelota en el fútbol Nacional, va ser rodada como una alcancía.
No estoy de acuerdo. Aunque nadie lea mi enojo; aunque nadie lo entienda, necesitaba decir que ya no voy a mirar el fuchi con las mismas ganas que antes. Ya no voy a investigar cómo salieron tales o cuales equipos para saber si nos falta mucho o poco, si seguimos o no, si necesitamos empate, ganar o qué.
Me quitaron las ganas de gritar.
Empieza otra era. Quizá peor que la que dejaremos atrás.
Ma Luz Dubedout.
@planluz en twitter
